viernes, 3 de marzo de 2017

La sed californiana

Docenas de sitios web presentan varias versiones de una nota sobre las consecuencias de la sequía en el estado de California EUA. En la mayor parte anuncian prácticamente un apocalipsis local. Antes de recurrir a fuentes basura, dense un tiempo para leer la información verificada sobre el tema.
 El JPL de la NASA mantiene el seguimiento de la subsidencia (hundimiento) de áreas en el estado de California, este efecto en esa zona es consecuencia de actividades humanas, concretamente de la extracción de agua. Para llevar a cabo este seguimiento han tomado datos de satélites propios y de la ESA https://www.jpl.nasa.gov/news/news.php?feature=6761


Hundimiento total en el Valle de San Joaquín para el período comprendido entre el 7 de mayo de 2015 y el 10 de septiembre de 2016 según lo medido Por Sentinel-1A de la ESA y procesado en JPL.

 



 Los resultados muestran una situación grave y en palabras del personal de estas instituciones es insostenible por poner en riesgo infraestructura que abastece a millones de personas. Esto no quiere decir que alguien este muriendo en California o que vaya a hacerlo por esta causa, pero si que la escasez de agua en esa región requiere medidas urgentes. Por lo menos desde la primer mitad de los años noventas hay planes para tratar de traer agua dulce desde Alaska. Solo en 2016 los impactos económicos de la sequía en California se valuaron en $603 millones usd (1) El reporte científico del caso registra un seguimiento minucioso del terreno y el uso de datos cruzados de diferentes fuentes para establecer conclusiones. Un trabajo notable y claro (2), Comparativamente los casos del hundimiento en la Ciudad de México, la contaminación del lago Titicaca o la evaporación del lago Poopó tienen muy poco seguimiento y análisis.  Solo por señalar los únicos datos significativos del hundimiento en la Ciudad de México son de 2014 y fueron tomados por el satélite Sentinel 1A (3) desde ese momento hasta la fecha no hay un seguimiento suficiente ni un plan ante esa problemática

Los escaneos de radar Sentinel-1A adquiridos entre el 3 de octubre y el 2 de diciembre de 2014 se combinaron para crear esta imagen de deformación del suelo en la Ciudad de México. La deformación es causada por la extracción de agua subterránea, con algunas áreas de la ciudad que se hunden a hasta 2.5 cm / mes (rojo).