La Revista de la Universidad de México en su número 152 del año 2016, nos cuenta un poco sobre la Plaza Tamayo:
“entre 1990 y 1991 construyó González de León la Plaza Rufino Tamayo, un homenaje al pintor y muralista mexicano poco antes de su muerte, en donde los elementos típicos de la obra del arquitecto se encuentran en un ejercicio mucho más plástico y libre, dando lugar a formas muy variadas. Elementos comunes como espejos de agua, un camino pergolado y una serie de marcos que, al ir reduciendo su tamaño, conducen a un mural basado en un cuadro de Tamayo, de los años cincuenta, lo que provoca una perspectiva escultural para las personas que la visitan o los automovilistas que pasan a su lado por la Avenida Insurgentes”
La plaza escultórica fue construida por González de León (1926-2016) en homenaje a su amigo Rufino Tamayo (1899-1991) en la esquina de Avenida de los Insurgentes y Rio Magdalena, es una estructura que podría confundirse con las edificaciones de la UNAM al estar justo en el borde del Campus. Tamayo solo conocería la maqueta, no logro vivir para verla inaugurada. La obra muestra de inmediato las formas y estilo clásicos de este arquitecto. Es notable de inmediato la monumentalidad y el peculiar estilo brutalista de la construcción, aunque su escala difiere de sus obras más notables. Pero no es lo único que hoy la distingue.
Al llegar al lugar, el olor de un cadáver animal putrefacto es lo primero que se nota al ingresar al interior de los arcos que forman el escenario. Detrás de estos, en la colindancia con el panteón San Rafael, bolsas de basura permanecen escondidas en el sitio donde fueron arrojadas. Una estructura improvisada con restos de lonas amarillas y blancas, sirve de vivienda a un indigente. Los olores terribles no provienen del panteón, tras recorrerlo es claro que ahí priva un olor vegetal discreto. El olor de la plaza se debe al descuido del lugar.
Al caminar entre sus arcos principales, se vuelve evidente la presencia de heces fecales y manchas de orines humanas. Por momentos el aire es casi irrespirable. Los pies de los arcos muestran otras marcas de actividad, manchas de hollín producto de fogatas. Probablemente son restos de noches frías superadas con fuego por los indigentes. Estas manchas de hollín llegan hasta el mural de mosaico. Esta pieza no solo presenta abandono, también esta parcialmente destruido por esas fogatas. En su esquina inferior derecha, los mosaicos se soltaron del sustrato y aún se encuentran en el piso.
Estado actual del mural de mosaico (6/4/2019) notese el área dañada en la esquina inferior derecha. |
El mural de mosaico es una reproducción de un trabajo al gouache de 1959 que Tamayo realizo en un proyecto teatral, de ahí el origen iconografico de la Plaza. En cuanto a su distribución, la plaza tiene espacios bien diferenciados, una explanada al frente del escenario, una pasarela elevada para observar ese mural con su efecto óptico de perspectiva, su espejo de agua y una pequeña pirámide al borde del teórico cuerpo de agua.
Gouache para el proyecto teatral Antigona, Rufino Tamayo, 1959 |
Del lado contrario, al oeste, después de pasar por un busto de Tamayo cagado por las aves. Un circuito formado por arcos constantes de menor dimensión, en una curva que por momentos desconecta la vista de los auto de insurgentes. Una vieja fuente permanece seca y sirve de refugio y almacén. Una pequeña manada de gatos vive en el espacio que debería ser la salida de agua, dos negros, uno manchado pardo y uno manchado amarillo, algunos mas se escuchan en los linderos del panteón San Rafael. Algunas escobas yacen acomodadas en lo mas alto. En la base del talud que sigue a este camino, algún vecino les pone alimento, el concreto ya muestra una mancha de grasa permanente.
Al caminar entre las jardineras que forman la parte sur de la plaza, un intenso olor a humedad satura el aire. Al parecer es agua estancada cuyos vapores permean el concreto. Solo dos personas además de nosotros cruzan el lugar en todo el tiempo que permanecimos ahí. El espacio nunca ha sido adoptado como propio por los vecinos o los estudiantes de ciudad universitaria. Testimonios de 1994, 2002, y 2017 ya refieren el abandono y la presencia de indigentes refugiados entre las columnas. No hay registro de actividades públicas realizadas en el lugar más allá de su inauguración. Aunque ninguno de los registros refiere restos de fogatas o daños al mural de mosaico. Este deterioro es reciente.
Este abandono habla de que a pesar de la magnitud y posibilidades, a pesar de la ubicación privilegiada, nadie parece saber que hacer con esta plaza.
El recorrido solo da señales tristes, el espejo de agua no ha visto agua desde la ultima época de lluvias, quizá, a juzgar por el olor, solo una ocasional orinada de parte de los indigentes. En donde debería haber agua, una costra seca de polvo acumulado por años se ha apelmazado en un capas que fueron lodo resecado al sol. A unos metros, una agencia automotriz y un "viene-viene" se han apropiado a la mala del espacio para hacerlo su estacionamiento privado.
El espacio escultórico como estacionamiento privado de facto |
Esta construcción vecina es mas reciente, data de 2011. Es una agencia de autos infinity construida en 2011 por el despacho arquitectónico Taller Plan A , a la fecha, esta obra es su pieza mas emblemática. La curiosa locación al borde la Ciudad Universitaria, los desniveles naturales y la presencia del espacio escultórico son una oportunidad arquitectónica por demás interesante. Aunque se trata de una edificación con fines mas bien mundanos y sin gran trascendencia; no obstante, no carece de méritos. La construcción, claramente Corbuseriana, compite discretamente con la plaza y mantiene un lenguaje visual similar, por las noches es ciertamente mas evidente por su trabajo de arquitectura iluminada en comparación con el ambiente pétreo y oscuro del concreto martelinado de la obra escultórica.
Esta construcción ciertamente le robo protagonismo respecto al estado previo a su construcción. Y si bien la transparencia del edificio elevado no la borra, si es imposible encontrar el espacio sin su razón comercial: los autos estacionados.
La Plaza Tamayo en 2008 |
Frente a la actual agencia de autos, un letrero señala que este espacio publico esta bajo cuidado de la empresa automotriz en colaboración con la delegación Álvaro Obregón. El lamentable estado del lugar mas allá del área visible por los clientes de la tienda de autos, habla de como esa colaboración no sustituye el trabajo serio de un gobierno. Aunque el momento actual tampoco es el de un gobierno local serio o responsable. La alcaldía está en manos de una antigua priísta que se separó de ese partidor en un arrebato de inconformidad: Layda Sansores. Hace años al no obtener la candidatura para ser gobernadora de su estado natal, Campeche, unió al PRD junto con una ola de priístas resentidos. En el 2000 se unió a los amigos de Fox. Finalmente se unió a amlo en su cargada por la presidencia. Llegó por esa via al senado y ahí destacó por su hábito de decir groserias en voz alta y por sus manejos corruptos. Cargaba compras personales de tonterías ostentosas a la cuenta pública. Por sus favores a morena fue recompensada con una alcaldía de un lugar que no conoce y de dónde evidentemente no es originaria. Ese esperpento adicto a las cirugías, sería la encargada de atender este espacio público. Lo más probable es que desconozca de su existencia.
La Plaza y la agencia automotriz en su estado actual (6/4/2019) |
La plaza en si, nunca estuvo libre de polémica, Raquel Tibol (1923-2015) la critico ampliamente en su inauguración. Una critica que habría de tomarse con reservas, Tibol era una autoridad dictatorial en el arte mexicano del siglo XX y algunos de sus argumentos solo refieren una obra aun no terminada, con materiales de construcción aun visibles y varillas no recortadas.
Aunque también la juzga en su diseño, la llama: una "representación escenográfica, artificiosa y arbitraria, donde se cuida más el impacto emocional triunfalista que la definición ética". Tibol, mantuvo un credo marxista duro como discurso a lo largo de su vida, muchas obras simplemente no entrarían en su concepto de ética.
Casi toda la obra de Teodoro González sera criticada con argumentos ideológicos. El también marxista arquitecto Carlos Véjar Pérez-Rubio. Director de la revista Archipiélago, en su libro -OANIS : objetos arquitectónicos no identificados : crónicas y relatos de la arquitectura y la ciudad. (1992) cataloga las obras de González de León como enormes bloques de concreto en colores pastel.
Y ciertamente hay aspectos ideológicos a discusión, González de León en su dupla con Abraham Zabludovsky fueron dos arquitectos mimados por el PRI en su etapa modernizadora. Como en su momento Mario Pani, Felix Candela o Pedro Ramírez Vázquez, tuvieron un acceso privilegiado a vastos recursos por su cercanía al poder. Y si bien, ninguno carecía de talento, queda para el reto de investigación buscar cuanto trabajo de otros y otras no logro ver la luz, por la sombra de algunos pocos elegidos por el PRI-Gobierno.
Visto desde el momento actual, este monumento a Tamayo destaca tanto su abandono como la falta de integración con el panteón San Rafael detrás de la plaza, un espacio cada vez mas olvidado, sus muros son una permanente barda publicitaria. El pequeño espacio del pueblo histórico que aun persiste en el lado norte del panteón ya es claramente disputado por los desarrollos inmobiliarios. En su interior yacen restos de personajes del fin del siglo XIX , principios del siglo XX y algunos aun mas antiguos que deberían por su sola antigüedad ser tratados con la importancia histórica que merecen.
En esta zona se ha descubierto en tiempos recientes una historia sacra mas larga de lo imaginado. En los predios aledaños, el INAH localizo tumbas realmente antiguas, de hasta 2500 años, pertenecientes a épocas prehispánicas.
Una de las antiguas tumbas monumentales que se encuentra dentro del panteón San Rafael |
El panteón San Rafael en el Mapa de la Ciudad de México y alrededores, hoy y ayer , Emily Edwards 1932 |
Pensando en este espacio desde fuera de sus evidentes problemas es claro que es una pieza reconocible de González de León. Es visiblemente menor que el edificio de Infonavit, el auditorio nacional o la torre conocida como “el pantalón” en Santa Fe, algunas de sus obras mas notables. También es claro que carece de la atención necesaria para ser un área publica saludable que tenga las condiciones para que la sociedad se apropie de ella en un sentido positivo. Es un espacio que mas que sub-utilizado, esta olvidado. requiere de la atención publica para dejar de ser un pequeño elefante blanco y convertirse en un espacio vivo que sea parte de la dinámica de esta ciudad.
Como epilogo valdría decir que González de León y el homenajeado Rufino Tamayo, ya dejaron una larga historia de trabajo. Las obras de este arquitecto son iconicas, pero no han estado nunca fuera de la polémica. Su ultimo trabajo notable, el Museo Universitario Arte Contemporáneo (MUAC) también fue sujeto de polémica por haber sido designado discrecionalmente para diseñar este espacio en Ciudad Universitaria. Este museo fue sujeto de critica tanto por su arquitectura, como por su contenido.
Finalmente no logro uno de sus proyectos más ambiciosos y arriesgados, un nuevo lago para la ciudad de México. Junto con Alberto Kalach y un grupo multidisciplinario, impulso por años la posibilidad de renovar de manera trascendental la urbe con un proyecto paisajístico lacustre. La propuesta México Ciudad Futura podría quedar para siempre enterrada como un recuerdo de una ucronia positiva para la Ciudad extensa.
triste
ResponderBorrarOtro espacio más cedido a los autos, no bastan los 50,000 km carril que la ciudad dedica al auto
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